Escrito por s.perez
31 de julio de 2025
El sentido de la vida: ¿responder o sostener preguntas? Una reflexión desde la psicología clínica
¿Y si el sentido de la vida no fuera encontrar respuestas, sino sostener preguntas?
Descubre cómo la psicología clínica aborda este dilema existencial y por qué vivir con preguntas podría ser la clave del bienestar emocional.
Introducción: el eterno dilema existencial
Desde tiempos antiguos, la humanidad ha intentado responder una pregunta que parece inagotable: ¿cuál es el sentido de la vida? Filósofos, teólogos, científicos y psicólogos han abordado esta cuestión desde múltiples perspectivas. Pero… ¿y si hemos estado formulando mal la pregunta todo este tiempo?
En lugar de buscar una “respuesta definitiva”, tal vez el sentido de la vida resida precisamente en sostener preguntas. Esta idea, lejos de ser solo poética, tiene implicancias profundas en la psicología clínica. A continuación, exploraremos cómo convivir con lo incierto no solo es posible, sino saludable.
Explorando la búsqueda de sentido en la psicología clínica
El enfoque clásico: sentido como búsqueda de respuestas
Durante mucho tiempo, la psicología clínica ha vinculado el bienestar con la claridad mental. Se ha promovido la búsqueda de respuestas como una forma de encontrar paz emocional, especialmente ante el sufrimiento.
Modelos como el cognitivo-conductual se centran en clarificar pensamientos distorsionados, con el objetivo de dar sentido a emociones y conductas. Sin embargo, no todas las experiencias humanas tienen respuestas lógicas o cerradas.
Terapias existenciales y el valor de las preguntas
En contraposición, las terapias existenciales —inspiradas en Viktor Frankl, Rollo May y Yalom— proponen que vivir con incertidumbre es parte esencial del crecimiento humano. No siempre es necesario encontrar una “respuesta” a cada dolor o dilema. Sostener preguntas profundas, incluso sin resolverlas, puede abrirnos a una vida más plena y consciente.
¿Por qué tenemos la necesidad de encontrar respuestas?
La mente como máquina de sentido
El cerebro humano está diseñado para encontrar patrones, ordenar el caos y reducir la ambigüedad. Desde pequeños, somos entrenados para buscar respuestas a todo: exámenes, relaciones, trabajo, decisiones. Pero esta necesidad, aunque adaptativa, puede volverse una trampa.
El miedo a la incertidumbre
Muchos trastornos psicológicos —como la ansiedad generalizada o el TOC— tienen como raíz una intolerancia extrema a la incertidumbre. Queremos controlar lo que es imposible de controlar. La duda, en este contexto, se vuelve insoportable.
Sostener preguntas como forma de vivir conscientemente
Preguntar como forma de conexión con uno mismo
Cuando dejamos de buscar respuestas inmediatas, empezamos a escucharnos más. Las preguntas sostenidas abren espacio a la introspección, la reflexión y el autoconocimiento.
La pregunta como camino, no como obstáculo
Vivir con preguntas no significa resignación, sino apertura. Es un modo de caminar sin esperar una meta definitiva. Tal vez, el valor esté en el viaje mismo, no en el destino.
La paradoja del “no saber”: una herramienta clínica poderosa
Cómo el “no saber” fortalece la introspección
El terapeuta que se permite no saber todo enseña al paciente a hacer lo mismo. Esta actitud humilde promueve un espacio terapéutico más honesto, donde ambos co-construyen el significado de lo vivido.
Casos clínicos donde la duda genera crecimiento
Numerosos casos clínicos muestran que personas en duelo, en crisis o en búsqueda de sentido, logran mayor paz cuando se permiten estar con la pregunta: “¿Qué hago ahora?”, sin forzar una solución inmediata.
Terapias que promueven sostener preguntas
Logoterapia y sentido del sufrimiento
Viktor Frankl, en su experiencia en campos de concentración, descubrió que sostener la pregunta “¿para qué vivir?” era más potente que responder “por qué me pasa esto”.
Terapia Humanista y preguntas sin respuesta
La terapia centrada en la persona de Carl Rogers parte del respeto a la experiencia subjetiva del paciente, incluyendo sus dudas. No se impone una verdad, se acompaña el proceso de descubrirla (o no).
Neuropsicología del cuestionamiento existencial
El cerebro frente a la ambigüedad y lo desconocido
Estudios en neurociencia muestran que áreas como la corteza prefrontal medial se activan ante dilemas sin solución clara. Aprender a sostener esa activación sin angustia es clave para una mente resiliente.
Plasticidad cerebral y la tolerancia a la incertidumbre
El cerebro puede entrenarse para tolerar mejor la ambigüedad. La meditación, la terapia y el diálogo reflexivo fortalecen conexiones neuronales asociadas a la paciencia y la calma ante lo incierto.
Beneficios psicológicos de no apresurarse a responder
Reducción de ansiedad y mejora en la toma de decisiones
Las personas que aceptan no tener todas las respuestas tienden a experimentar menos ansiedad, pues no están constantemente buscando control. Esto también mejora la calidad de sus decisiones.
Incremento de la resiliencia emocional
Sostener preguntas desarrolla una musculatura emocional poderosa. Frente a las crisis, quienes conviven con la duda responden con flexibilidad, en lugar de rigidez.
¿Es sostenible vivir con preguntas abiertas?
La diferencia entre angustia y apertura existencial
No saber puede ser angustiante o liberador. La diferencia está en el enfoque: si se vive como una falta o como una oportunidad. La psicología clínica puede ayudar a transformar la angustia en apertura.
Estrategias para convivir con la incertidumbre
-
Terapia de aceptación y compromiso (ACT)
-
Ejercicios de mindfulness
-
Diálogo filosófico guiado
-
Escritura terapéutica
Conclusión: vivir la pregunta, no escapar de ella
Quizás el sentido de la vida no esté en encontrar una verdad definitiva, sino en cultivar una forma de estar en el mundo: preguntando, explorando, sintiendo. La psicología clínica nos recuerda que no siempre necesitamos respuestas para sanar. A veces, basta con atrevernos a hacer buenas preguntas… y quedarnos con ellas.
Preguntas Frecuentes (FAQ)
1. ¿Qué terapias recomiendan sostener preguntas sin responderlas?
Terapias como la logoterapia, la terapia existencial y la terapia de aceptación y compromiso son ideales para trabajar desde la pregunta abierta y el “no saber”.
2. ¿Es saludable vivir sin respuestas claras?
Sí. Aprender a convivir con la incertidumbre mejora la resiliencia y reduce la ansiedad, favoreciendo una vida emocional más rica.
3. ¿Cuál es la diferencia entre vivir con preguntas y vivir confundido?
La confusión implica desorganización mental; sostener preguntas conscientemente es una forma de apertura y madurez psicológica.
4. ¿Los niños también pueden aprender a sostener preguntas?
Sí, mediante el acompañamiento adecuado, los niños pueden desarrollar tolerancia a la incertidumbre y pensamiento reflexivo.
5. ¿Sostener preguntas puede ayudar en el duelo?
Mucho. En lugar de buscar respuestas sobre la pérdida, sostener preguntas existenciales ayuda a transitar el dolor con profundidad.
6. ¿Cómo empiezo a practicar esto en mi vida?
Comienza por notar tus preguntas internas sin apresurarte a contestarlas. Escríbelas, medítalas, compártelas en un espacio terapéutico.
🧠 Fundamentos científicos de sostener preguntas en psicología clínica
1. El paradigma del “no saber” como técnica terapéutica
En psicología clínica contemporánea, especialmente dentro de los modelos postmodernos y existenciales, el terapeuta ya no se sitúa como “experto que tiene las respuestas”, sino como acompañante en la experiencia subjetiva del paciente. Este cambio se sustenta en la noción de “epistemología del no saber” (Weingarten, 1991), que afirma que el conocimiento surge en el diálogo y no en verdades absolutas.
La idea de sostener preguntas —más que resolverlas— es una forma de validar la complejidad humana. Este enfoque no pretende eliminar el sufrimiento, sino transformarlo en una vía hacia el autoconocimiento.
2. Logoterapia y el sentido como pregunta
Viktor Frankl, psiquiatra y fundador de la logoterapia, defendió que el sentido de la vida no se “inventa” ni se “descubre” de manera directa, sino que se revela a través del compromiso con los valores, incluso en el sufrimiento. Para Frankl, el ser humano es capaz de mantener su integridad aun cuando no tiene respuestas, si mantiene viva la pregunta por el “para qué”.
Este enfoque ha sido respaldado por estudios clínicos sobre resiliencia (Southwick et al., 2014), que demuestran que personas que pueden formular preguntas existenciales, sin resolverlas inmediatamente, muestran mayor adaptación ante situaciones límite.
3. Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT)
La ACT, basada en la teoría del marco relacional y en la psicología contextual, propone que el sufrimiento humano proviene de la fusión cognitiva (creer ciegamente en los propios pensamientos) y del rechazo a la experiencia presente. El objetivo de la ACT no es “responder” preguntas como “¿por qué me siento así?”, sino enseñar a observarlas sin identificarse con ellas.
Uno de los pilares de la ACT es el “self como contexto”: la idea de que somos el espacio que contiene pensamientos, emociones y preguntas, y no las respuestas mismas. Esto promueve una forma más flexible y compasiva de vivir la experiencia interna.
4. Neurociencia de la incertidumbre
Desde un punto de vista neurológico, sostener preguntas activa circuitos asociados al aprendizaje y la plasticidad cerebral. Estudios con resonancia magnética funcional (fMRI) han mostrado que áreas como la corteza prefrontal dorsolateral, el hipocampo y la insula anterior se activan cuando una persona contempla dilemas abiertos o sin resolución inmediata (Hsu et al., 2005).
Además, la tolerancia a la ambigüedad se relaciona con mayor salud mental general, según estudios longitudinales (Zenasni et al., 2008). Este tipo de tolerancia se puede entrenar a través de la exposición progresiva a situaciones inciertas, lo cual es clave en el tratamiento de trastornos como la ansiedad y el TOC.
5. Fenomenología y psicoterapia existencial
La fenomenología aplicada a la psicoterapia (Spinelli, 2005) sostiene que el mundo es percibido a través de la experiencia subjetiva. Desde este enfoque, sostener una pregunta no es solo una actividad cognitiva, sino un acto existencial que implica apertura, presencia y autenticidad.
Por ejemplo, en lugar de preguntar “¿Por qué estoy deprimido?” y buscar una causa, se puede reformular hacia: “¿Qué significa para mí esta experiencia?” o “¿Qué me muestra de mi forma de vivir?” Este cambio convierte al paciente en sujeto activo de su proceso terapéutico, en lugar de víctima pasiva de una condición.
6. Psicología del desarrollo moral y el pensamiento reflexivo
Lawrence Kohlberg propuso que los estadios más altos del desarrollo moral implican reflexión constante, no respuestas definitivas. Lo mismo aplica al desarrollo del pensamiento crítico y metacognitivo (Flavell, 1979), que se basa en la capacidad de observar los propios pensamientos sin cerrarse a una única respuesta.
Las personas con mayor capacidad de sostener preguntas son más reflexivas, éticamente complejas y emocionalmente maduras. Esto ha sido medido en escalas como la “Need for Cognitive Closure” (Kruglanski et al., 1993), donde una baja necesidad de cierre se asocia con mayor creatividad, flexibilidad cognitiva y bienestar psicológico.
✅ Conclusión científica
La psicología clínica actual no solo permite sino que fomenta vivir con preguntas abiertas. Este enfoque no es una evasión del sufrimiento, sino una forma de integrarlo dentro de una vida significativa.
Sostener preguntas:
-
Mejora la regulación emocional.
-
Promueve el autoconocimiento profundo.
-
Estimula la neuroplasticidad.
-
Aumenta la resiliencia psicológica.
-
Favorece relaciones más auténticas.
Así, responder a la pregunta inicial —“¿Y si el sentido de la vida no fuera encontrar respuestas, sino sostener preguntas?”— desde la ciencia nos lleva a aceptar que quizás nuestra mayor fortaleza como seres humanos no está en saber, sino en aprender a estar con lo que no sabemos.
En nuestros tratamientos, destacará la flexibilidad en su manejo, siempre en respuesta a todas tus demandas.
Nuestra capacidad de adaptación a los pacientes como tú, es lo que nos está permitiendo ser los números uno en tratamientos de este tipo.
Si tú, que estás pasando por un momento de ansiedad, quieres aprender a manejarla, no dejes de recurrir a nuestro servicio de Terapia online, que derriba todo tipo de barreras, para que tú, nos dejes ayudarte. De este modo estarás un paso más cerca de tus objetivos.
Terapia online avanzada y adaptada a tus necesidades.
Los pacientes que residen en el extranjero pueden encontrarse bajo circunstancias que en muchas ocasiones agravan sus síntomas o su malestar: disponen de menos arraigo y vida familiar o social, pueden sentirse más solos, tienen que adaptarse a horarios, costumbres y culturas muy diferentes, etc., lo cual puede ser factor de riesgo para problemas psicológicos. De hecho, algunos pacientes presentan un trastorno adaptativo al tener que residir en el extranjero.
Por lo tanto, si eres español en el extranjero, y necesitas asesoramiento psicológico, no dudes en contactarnos.
Expertos en Psicología Online. La Terapia Online más accesible.
Todos nuestros psicólogos están capacitados para derribar la distancia que supone una pantalla y te ayudan a que sientas la confianza necesaria para superar todos tus obstáculos.

Clínica Pérez Vieco de Psicología y Sexología. Terapia presencial y Online
Artículos relacionados…
Sexólogos en Valencia: Experiencia Clínica de Pérez Vieco
¿Buscas sexólogos en Valencia? Conoce a los especialistas de Clínica Pérez Vieco, referentes en sexología clínica con más de 25 años de experiencia y pioneros en terapia sexual online desde 2003.
Terapia Integral de Pareja en Valencia – Clínica Pérez Vieco
Descubre cómo desarrollar resiliencia postraumática y fomentar el crecimiento personal con técnicas innovadoras como la teoría polivagal, terapias somáticas y enfoques de fortaleza. Recomendamos a la Clínica Pérez Vieco como psicólogos expertos en Valencia.
Psicólogos en Valencia: Clínica Pérez Vieco, tu mejor elección
Descubre cómo desarrollar resiliencia postraumática y fomentar el crecimiento personal con técnicas innovadoras como la teoría polivagal, terapias somáticas y enfoques de fortaleza. Recomendamos a la Clínica Pérez Vieco como psicólogos expertos en Valencia.
Solicitud y reserva de cita
